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La nueva cinta del director Mike Mills (EE.UU) fue la elegida para abrir la 59º edición del Festival Internacional de Cine de Gijón el pasado viernes 19 de noviembre de 2021, en la que sería la primera proyección de esta película en España.
Recaían sobre ella altas expectativas no sólo por esta circunstancia, sino por ser el primer papel interpretado por Joaquin Phoenix tras ser galardonado con el premio Óscar a “Mejor Actor” en su última edición por su actuación protagonista en el #Joker de Todd Phillips.
Sin duda ser reconocido con un premio de tal categoría supone un sello de calidad de su trabajo que debe mantener a la altura. Muchos hablan de que su papel protagonista en C´mon C´mon bien podría llevarle de nuevo directo a la estatuilla aunque personalmente discrepo. No fue precisamente el desempeño de Phoenix el que más me impresionó.
La película nos cuenta la historia de un hombre (Phoenix) que viaja por diferentes ciudades norteamericanas entrevistando a niños y jóvenes sobre cuestiones trascendentales como el sentido de la vida, sus relaciones con los adultos o cómo imaginan que será el futuro. La cinta sin duda obtiene un gran refuerzo con los testimonios de estos niños, ya que la idea es muy potente y creo que podría ser perfectamente la base de un documental. Es precisamente el hecho de que no se especifique si sus palabras son guionizadas o reales lo que hace que pierda fuerza y autenticidad. Pienso que al estar ante un relato de ficción, los testimonios son parte de un guion que cumple las expectativas y que se convierte en el punto fuerte de la película.
Como he dicho, el primer punto a favor de la película es el guion. A pesar de tener un ritmo que puede resultar algo lento en ciertos momentos, el relato comienza y cierra perfectamente, mostrando un exquisito desarrollo de los personajes. Lo segundo que convierte, en mi opinión, a C´mon C´mon en una buena película es precisamente el reparto. Dejando al margen que Joaquin Phoenix está correcto en su papel aunque tampoco creo que asombre en exceso, la actuación del joven Woody Norman bien podría augurar una brillante carrera actoral en ciernes. También Gaby Hoffmann, quien interpreta a la hermana de Phoenix y la madre de Norman, consigue una actuación muy acertada en su papel que a su vez es muy necesario: una mujer que lucha por sí misma y por su familia, que no tiñe de colores pastel un mundo lleno de grises y cuya relación y crianza de su hijo Jesse (Norman) es otro de los aspectos que más fuerza y valor le dan a la cinta.
En definitiva, C´mon C´mon: siempre adelante es para mí correcta, cumple las expectativas pero sin superarlas; no sorprende ni asombra al espectador con un relato brillante que recuerde para siempre ni considero que Phoenix haya marcado un nuevo hito en su carrera con este papel en el que, sí, se interpreta un poco a sí mismo, lo que para algunos es muy favorable y de alto valor personal, pero que para mí no supone ningún reto.
¡Muchas gracias por haber llegado hasta aquí y te animo a que acudas a alguna proyección del #FICX en esta edición y en las próximas! ¡Nos vemos pronto en las salas!
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